La gente amable, los impresionantes y modernos edificios mezclados con estructuras milenarias, orden y seguridad son los elementos que quizá se deban tomar en cuenta si se quiere hablar sobre la República Popular China.

Un breve recorrido por la ciudad de Beiging cautiva a cualquiera con intensos y diversos colores de sus estructuras históricas, enormes templos erguidos en épocas de dinastías que dejaron sus huellas, pero hay más razones para dar una oportunidad y escuchar a la China que celebra en grande los 70 años de fundación como República Popular.

La experiencia propia me lleva a determinar que quizá Latinoamérica continúa enseñando a las nuevas generaciones mitos y estereotipos que relatan personas que no han pisado esta tierra. 

La oportunidad de conocer tres ciudades de esta nación me permitió como comunicador encontrar las raíces de este buen pueblo, de su gente y la razón de su positivo desarrollo como país y potencia mundial y a ser portavoz de lo vivido.

Parte de lo llamativo al llegar a China es la infraestructura vial que no destaca únicamente por su amplia capacidad y excelentes condiciones, sino también por la limpieza casi utópica que da gusto y que se observa también en las aceras de cada uno de los barrios que recorrimos.

Camiones con agua y escobas automáticas recorren las calles constantemente para limpiarlas y en otros sectores hay personal de sanidad con equipos sencillos levantando cada uno de los desechos que encuentren, pero también es difícil observar a personas tirando basuras en vía pública.

Pequeños detalles hacen grande a ese pueblo, según experiencia personal de gente trabajadora, amable y sonriente pese a la barrera idiomática.

El desarrollo de este país es notorio. Por ejemplo, la esperanza de vida de los chinos pasó de los 35 años en 1949 a los 77 años, según datos publicados en la revista China Hoy. Además, desde hace aproximadamente dos años no existe el programa de planificación familiar que invitaba a las parejas a tener solo un hijo.

No se pueden dejar de visitar las reconocidas estructuras históricas, como la Gran Muralla, el Palacio Prohibido, el Palacio de Verano, las cuevas de la montaña de Mauji o la Plaza de Tiananmen, donde se debe reconocer y tomar como buen ejemplo, el alto número de turistas locales que llegan hasta esos puntos. 

Para recorrer Beijing se debe utilizar el metro, un sistema de transporte público eficiente, económico y sencillo de usar que ayuda a disminuir el alto tránsito en esa capital y que quizá debería ser tomado como modelo de desarrollo en algunos países latinoamericanos.

Entre enero y junio del 2019, la economía china creció un 6,3% en comparación al mismo periodo de 2018 y atrajo 478.330 millones de yuanes en Inversión Extranjera Directa, representando un aumento del 7,2% respecto al año anterior, según un artículo publicado en esa misma revista.

Parte de la economía de China es la gastronomía, uno de los temas que más impactó porque los estereotipos y mitos en este caso son fuertes.

Basta con pasar por un callejón e ingresar a cualquier restaurante para determinar que la comida china en Latinoamérica está adaptada y bastante distanciada de lo que consumen los chinos.

Dos, que la gastronomía es de olores fuertes y sabores intensos, pero se debe perder el miedo porque si bien es cierto se consumen algunas especies exóticas, no es lo más común.

En cambio la experiencia nos permitió conocer el delicioso y tradicional pato asado o los fideos con res de la ciudad de Lanzhou y pescado, o carne de cerdo pero siempre acompañado de alguna salsa.

La revista China Hoy señala que China es la segunda economía del mundo, el primer país en manufactura, el mayor país en comercio de mercancías, el segundo en consumo de productos y el segundo en introducción de capital exterior.

Su reserva de divisas ocupa desde hace varios años consecutivos el primer puesto en el mundo.

Incluso la economía del pueblo es activa con la facilidad de las tecnologías y es poco común ver tarjetas o efectivo en ese país, debido a que es muy popular realizar pagos mediante una aplicación y red social llamada WeChat, que permite ligar su cuenta bancaria y realizar pagos con sólo escanear un código QR en el local que realiza las compras.

Pero también llegamos hasta las ciudades de Lanzhou, TianShui de la provincia de Gansu, que nos demuestra como la buena organización permite el crecimiento, desarrollo y construcción de una provincia de gente trabajadora. 

Gansu es una provincia en desarrollo de China, cuenta con 26 millones de habitantes y en Tian Shue, se puede observar condiciones distintas a las de Beijing o de Lanzhou, con muchas construcciones de casas, edificios y algunos importantes trabajos en carreteras y puentes, además de cultivos de vegetales y frutas.

La organización del estado les permitió construir desde 2012 la ciudad de Nueva Lanzhou, que y cuenta con 320 mil habitantes en una extensión de 1744 kilómetros cuadrados 

En siete años ya cuentan con 294 kilómetros cuadrados construidos, 197 calles y autopistas, 56 guarderías, 44 escuelas secundarias y seis hospitales, con una inversión 15 mil millones de dólares de inversión privada y del gobierno para construir nueva Lanzhou.

Finalmente para hablar del paso por China se debe hablar el desarrollo de los medios de comunicación que nos muestra como por ejemplo Gansu New Media, China Hoy o la agencia de noticias XinHua, piensan en ofrecer variedad de productos informativos desde una plataformas y en algunos casos como el GNM redacciones con equipos que generan el mismo contenido de manera seria y otros que lo realizan con un poco de entretenimiento.

La visita a esos medios permitió conocer la importancia que dan a la medición y monitoreo de datos y comentarios de su público en tiempo real en enormes pantallas en las salas de redacción, así como la versatilidad que se debe tener como periodistas en la actualidad.

Los medios en China, que cuentan con un importante apoyo del Estado, esperan que sus pares latinoamericanos busquen la información directamente en ese país cuando deban informar sobre lo que ahí sucede, al igual que lo hacen ellos cuando informan sobre nuestra región. Zhao Hui, de la agencia de noticas Xinhua, explica que hay al menos seis medios chinos establecidos en el continente americano.

En resumen se debe valorar la necesidad de conocer sobre China por quienes viven ahí para poder emitir algún criterio básico.