Corría el año 1892, cambios políticos y educativos, además de la influencia de la Iglesia Católica marcaban el futuro de Costa Rica, fue un 9 de julio de ese año, en el cantón de Desamparados, donde nació Francisco María “Paquito” Núñez Monge, el hombre quien se convertiría en una autoridad del periodismo en las próximas décadas.

Siendo apenas un joven de 18 años de edad don “Paquito” Núñez, visitaba las redacciones de los diarios costarricenses, desde ese momento su interés por ser periodista lo daba a conocer y fue así como logró su primer trabajo como reportero en el desaparecido "Diario de Costa Rica".

Don Francisco se caracterizaba por su trabajo e iniciativa, en 1917, a los 25 años de edad, publicó su primer libro "Mi Tierra Nativa", un estudio histórico, geográfico y estadístico sobre su pueblo, Desamparados.

Como parte de su compromiso con los comunicadores de la época, participó en 1922 como directivo de la Junta Directiva de la primera Asociación de Prensa de Costa Rica −que luego pasaría a ser el Colegio de Periodistas de Costa Rica −.

Su vida no fue sencilla, en el año 1930, Costa Rica era un país donde sobresalía un ambiente de paz y tranquilidad, de gente campesina, honrada y trabajadora, sin embargo, se vivían momentos angustiantes por el desempleo y la desaceleración de la economía, Francisco fue testigo de las injusticias de aquellos tiempos, además en esos años don “Paquito” sufrió uno de sus mayores dolores, la muerte de su hija.

Momentos memorables

Recibir distinciones fue parte del curriculum de este famoso periodista, uno de los más apreciados fue el “Premio de Periodismo María Mors Cabot”, de la Universidad de Columbia en 1951.

Francisco María Núnez también se desempeñó como escritor, algunas de sus publicaciones son: Miscelánea (1914), La Revolución del 22 de febrero de 1918 (1918); Costa Rica Ganadera (1931); Grecia su Centenario (1939), La evolución del periodismo en Costa Rica (1946), Diez ensayos biográficos (1951), Documentos relativos a la guerra contra los filibusteros (1956): Dos Cercas (1971), San José capital de Costa Rica (1973), De última cosecha (1974), entre otras.

Sus conocidos lo describen como un hombre culto, quien visitaba frecuentemente la Biblioteca Nacional, un soñador que inspiraba a otros con su sencillez. Siempre se le veía caminar por las calles josefinas con vestido entero, chaleco y corbata, además de su sombrero color café.

La historia del periodismo costarricense no volvió a hacer la misma desde el 12 de marzo de 1984, fecha en la que falleció este apasionado del mejor oficio del mundo.

Uno de los espacios del Colegio de Periodistas de Costa Rica y Profesionales en Comunicación lleva el nombre del periodista Francisco Núñez Monge.