• Exposición de cuarenta y nueve obras se exhibe en el Costa Rica Country Club.

Cuarenta y nueve obras realizadas en técnica mixta forman parte de la exposición Reflexiones, de la pintora Elisa Morera, que se inauguró este jueves 8 de agosto en el Costa Rica Country Club, a las 7:00pm.

Rostros y cuerpos en acrílicos y resina impregnados en madera, son el manifiesto silente de niños y mujeres cuya melancolía traspasa el umbral del dolor. Algunos de estos personajes provenientes del vecindario nacional o transatlántico evocan en sus miradas penetrantes un grito de protesta a la intolerancia y discriminación.

“Hoy solo quiero dejar una pequeña huella de lo que sale de mi alma, ser la voz por todos esos niños que quieren vivir un mundo mejor y de mujeres agredidas y acosadas que no se les ha dado el mismo trato ante la sociedad” enfatizó la pintora.

Luego de vivir varios años en Nebraska, Estados Unidos, en donde su obra es exhibida con éxito, Elisa Morera regresa a Costa Rica, su país natal, para presentar esta gran exposición que refleja madurez en el dominio del color y composición, con fuerte contenido temático.

Morera cambia el lienzo por la madera, un material que la artista considera cálido y noble, “que si bien se ha ido perdiendo con el tiempo a causa de problemas ambientales, da un toque único y especial a la obra”.

Además, es la única mujer y latina que está participando en un Estado completamente conservador, representando a Costa Rica.

Reflexiones estará en exhibición en el Costa Rica Country Club hasta el 31 de agosto del 2019.

Biografía

Elisa Morera nació en Alajuela, provincia en donde cursó sus estudios primarios y secundarios. De niña siempre supo que su pasión era el arte, pues el dibujo, especialmente de rostros, ocupaba la mayor parte de su tiempo y pensamiento.

“La maestra siempre nos leía un cuento y al final del día teníamos que hacer un resumen y bosquejo del mismo. Yo le añadía un dibujo. Siempre recibía buenos comentarios por parte de ella”, comentó la pintora.

En el inicio de su carrera en las artes plásticas, Morera fue autodidacta, pero con el paso de los años se rodeó de maestros especializados y perfeccionó técnicas como las que se podrán observar en Reflexiones.

Aunque Elisa Morera se ha destacado más por sus retratos, que por paisajes u otras temáticas, fueron sus exposiciones La Chanchada y Del Chanchiposario al Maripochancho, realizada en cerámica de chanchos regordetes intervenidos en acrílicos, resinas, piedras y metales, convertidos en personajes irreverentes, algunos ordinarios y otros sofisticados, que fueron exhibidos en la Galería Sophia  Wanamaker, las que colocaron a la artista en un importante sitial en el arte objeto en el país.

Las obras de Elisa Morera se han presentado en el Museo Pedro Domenech en Puerto Rico, en la Galería Leonardo Galleries en Toronto, en la Galería 1516 Omaha Nebraska, Estados Unidos, Museo D’ Louvre Paris en Francia y fue miembro del grupo de artista Los 20.